Son 6:30 h de la mañana y suena el despertador. Me cuesta abrir los ojos pero no tardo ni un segundo en levantarme, hoy no toca trabajar, hoy toca coger un avión rumbo a las vacaciones.........
.......El Camino de Santiago en bicicleta plegable.
Ducha rápida, ultimo vistazo al equipaje, Bici, ok, herramientas, ok, cubierta extra, ok ropa, ok, bueno si falta algo ya lo compraremos por el camino. Taxi hasta el aeropuerto y desayuno en la cafetería de los viajes junto a los mostradores de facturación. Ya solo queda escala en Madrid y rumbo a Pamplona, de todas las combinaciones desde Palma era la mas rápida y la mas económica.
A punto de embarcar empezamos a descubrir posibles peregrinos, contactamos con Anna austriaca y Helga eslovaca, decidimos compartir un taxi hasta Roncesvalles, 15 euros por cabeza y en poco menos de una hora estamos ajustando las bicicletas a los pies del monasterio, después de un paseo por los alrededores disfrutando de las vistas acudimos a la misa del peregrino.
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Colegiata de Roncesvalles, Iglesia Colegial,
Imagen de Santa María de Roncesvalles (XIV) |
Decidimos no madrugar y tomarnos la primera etapa con calma, ha amanecido nublado y con una niebla espesa que es muy habitual por el microclima de la zona, selva de Irati. El suelo esta húmedo así que desayunamos tranquilamente en Casa Sabina, dos cafés y tostadas con mantequilla y mermelada.
Son las 10:30 y se empieza a despejar, es hora de pedalear, rodamos despacio por la carretera y en algunos tramos más o menos llanos nos dejamos llevar por la magia de los caminos frondosos de piedras y raíces . Curiosamente me recuerda a la naturaleza de Nueva Zelanda.
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| Valle del Erro |
El tramo más complicado fue la subida al Monte del Erro por los camiones, sobretodo por uno doble que me pasa a pocos centímetros y parecía que nunca se acababa, por lo demás todos los vehículos eran muy respetuosos al adelantarnos y no había excesivo trafico.
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Peregrinos, Indicaciones del Camino en Pamplona,
Monumento al enciero de Rafael Huerta (2007) |
Todo el esfuerzo quedo recompensado por unos maravillosos pintxos en las calles de Pamplona, estos son sólo algunos que quedaron retratados, los demás acabaron en nuestras panzas.
* Los Km son una referencia aproximada, pueden ser mas o menos dependiendo si nos desviamos para hacer fotos, ir al bar o buscar hoteles.
